martes, 15 de febrero de 2011

Logro desbloqueado: Odiando a los papás.

Por primera vez ví a nuestro Chiquitín enojado. Si de algo puedo presumir es el hecho de que mi hijo siempre me sonrié desde que descubrió que podía sonreir. La primera sonrisa que me dá es en la mañana que lo levantamos antes de ir a dejarlo con sus abuelos. Incluso los días que se levanta llorando, después de unas cuantas lágrimas nos regala una sonrisita bebuna.
Creo que hoy no se desperto muy de buenas, así que cuando le dimos la medicina que le recetó su pediatra, su reacción fue poner una extraña carita en el que nos mostraba que no estaba muy feliz de que hubiera empezado así la mañana. Son dos medicinas las que debe tomar, la primera sabe a rayos, la segunda sabe a frutitas. Siempre le hace feo a la primera, pero la segunda en verdad que parece disfrutarla. El día de hoy con el sabor de la primera medicina fue suficiente para que, desde que la tomó hasta que nos despedimos de él en casa de sus abuelos, no nos dejara verle una sonrisa. Seguramente esta será la primera de muchas veces que creerá que estamos equivocados en lo que hacemos con él.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Logro desbloqueado: El tesoro del saber.

Hoy nos dimos una escapada a una librería cerca del trabajo. Después de recorrer un par de pasillos, llegamos a la sección de libros para niños. Uno de mis sueños es hacer un libro para niños. Es increible ver los temas que manejan: tan básicos pero que no se le ocurrirían a cualquiera y mucho menos desde la perspectiva corecta para que un niño lo entienda. Inevitablemente me pregunté: ¿Qué libros le gustaran a nuestro chiquitín?. Imaginé llegando un día con él de la manoa una librería y diciendole: Escoge un libro para comprartelo. Creería yo que buscaría libros de robots o de monstruos. Ví uno el día de hoy que se llamaba "La escuela del terror" y en la portada podía verse una casa llena de murcielagos y arañas. Había uno sobre "gigantes" y otro sobre "sirenas y otros seres marinos". Mi sorpresa va a ser cuando busque libros sobre coches o sobre cohetes, o más extraño aún, sobre Jazz o Historia del arte.

lunes, 7 de febrero de 2011

Logro desbloqueado: Haz de "mamá" una semana

Tenía casí dos años que no tomaba vacaciones en la oficina como Dios manda, así que a principios de febrero pedí una semana de descanso. Ese descanso en realidad era pasar el tiempo con mi Chiquitín y experimentar todo o que mi adorada Maridita vivió durante los 3 meses que estuvo de incapacidad. En resumen el primer día fue de provocar los llantos del bebé por no apegarme a los estrictos horarios de comida que tiene. El segundo día aprendí que sí tenía preparadas las mamilas media hora antes de su hora de comida todo era más sencillo. Miercoles y Jueves fueron días en que mi Chiquitín cumplía al pie de la letra las reglas básicas de los bebés: Comer, dormir, comer, dormir. El viernes fue el último día de mi papel de "Mamá" y lo que parecía ser un día tranquilo, se convirtió en el día más pesado, pues ya había hecho planes de que iríamos a la oficina por mi Maridita, por lo que antes de las 2 de la tarde tenía que desayunar, bañarme, alimentar al Chiquitín y preparar su pañalera. 4 simples acciones que se volvieron imposibles cuando nuestro peque no logró consiliar su sueño matutino debido a descuidos de mi parte, como hacer mucho ruido al acomodar algunos trastes.
Antes de tomar esta semana de vacaciones, planeaba que en mis "días de descanso" me sentaría a ver películas con el bebé, que desempolvaría esos juegos de xbox que estaban medio olvidados, que arreglaría mi carpeta de ilustraciones  y de pasó hasta me echaría unas pestañitas. Al final, cuando tenía suerte, tenía 15 minutos libres para bañarme y arreglarme antes de que el bebé exigiera mi atención.
No me quejo de mi "semana de vacaciones", porque estuve más cerca de mi bebé como nunca he estado. Me sorprendió con muchas de sus "acciones bebunas" y experimenté la hermosa sensación de que los gestos que hacía y sus reacciones a mi voz me hicieran ver que su cerebrito comenzó a entender que la persona que le hablaba como perico mientras lo acurrucaba en sus brazos es su papá.